domingo, 29 de noviembre de 2020

Raúl Zurita

El poeta chileno Raúl Zurita recibió esta semana el XXIX Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana. Poeta siempre comprometido con la libertad, que sufrió torturas durante la dictadura chilena, es la suya una poesía vital y cercana en la que naturaleza y experiencia humana se entrelazan, como en nuestro poema de esta semana.

                  Amadas piedras

 

Somos el aire más duro que toca, el primer

sueño, las palabras que jamás se dijeron,

murmuran encaramándose las piedras de Chile

porque si tú sientes el latido de los riscos

entenderás que mi amor es igual que tu amor

y que mi pena es también la tuya.

Que los roqueríos palpitan y se encrespan y

hablan

y entonces en la oscuridad, cuando ya hayas

cerrado este libro

al menos sentirás mi mano buscando la tuya

aquí, en la durísima noche de las piedras.




 


domingo, 22 de noviembre de 2020

25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer

Un año más llega el día contra la violencia de género y la situación lejos de mejorar no ha hecho más que agravarse con la pandemia y el confinamiento que trajo con ella a partir de marzo. No queremos dejar pasar la ocasión sin contribuir con nuestro poema de la semana a poner el foco en uno de los problemas más graves de nuestra sociedad. Para ello hemos elegido un poema de la escritora y editora sevillana Rosa García Perea que apareció en un folleto que editó la Junta de Andalucía titulado Poesía vs violencia de género. No más prisioneras del terror en los hogares, no miremos hacia otro lado y contribuyamos entre todos a que más mujeres salgan de ese círculo de miedo y opresión.

                            PRISIONERA DE MÍ

¿Qué luz se pierde entre mis manos

que nada encuentro si no es ella?

Y me lleva a cada rincón de esta celda

a buscar la verdad de mis quebrantos.

Bailando no encuentro el consuelo

pero me ayudo a contar los pasos,

y me llena el corazón de notas

que se parecen al latido que pierdo.

Prisionera de mi propia celda.

Soy yo quien guarda la llave de esta cárcel.

Soy yo quien ciega las ventanas.

Quien se interpone entre la luz y mis manos.

Quien me niega el pan y la sal.

Soy yo.

Y sin embargo, sigo caminando en círculos.

Orientándome en la oscuridad,

obcecada en encontrar la salida

que yo misma me negué en la entrada.




 

 

 


domingo, 15 de noviembre de 2020

Fina García Marruz

La poeta cubana Fina García Marruz (La Habana, 1923) pertenece al grupo literario surgido en torno a la revista Orígenes. Ha recibido la mayoría de los premios literarios de poesía en español. Es la suya una poesía sencilla y profunda, que busca la emoción de las cosas y los gestos cotidianos, como esa mano que se pierde en busca de la realidad, que aparece en nuestro poema de la semana.

Cuando el tiempo ya es ido, uno retorna

 

Cuando el tiempo ya es ido, uno retorna

como a la casa de la infancia, a algunos

días, rostros, sucesos que supieron

recorrer el camino de nuestro corazón.

Vuelven de nuevo los cansados pasos

cada vez más sencillos y más lentos,

al mismo día, el mismo amigo, el mismo

viejo sol. Y queremos contar la maravilla

ciega para los otros, a nuestros ojos clara,

en donde la memoria ha detenido

como un pintor, un gesto de la mano,

una sonrisa, un modo breve de saludar.

Pues poco a poco el mundo se vuelve impenetrable,

los ojos no comprenden, la mano ya no toca

el alimento innombrable, lo real.




domingo, 8 de noviembre de 2020

Raquel Vázquez

La joven poeta gallega Raquel Vázquez recibió el Premio a la Creación Joven de la Fundación Loewe en su XXXII edición. Su poesía se ancla en la realidad, pero observándola con una mirada nueva y llena de imágenes poderosas, como la de esos raíles que se llevan nuestra vida. 

RAÍL

 

Todos tus sueños hechos ventanilla.

Cargas con lo correcto, sin defraudar a nadie.

Y para los andenes te has roto la mirada.

 

Un millón de caminos

perpetran en tu espalda los recuerdos

que has llevado a desguace en el futuro,

que no han sido presente.

 

Tu equipaje es, te dices, el que te corresponde.

El único posible.

 

Para aliviar la herida,

sólo sabes cerrar fuerte los ojos.



 

 


domingo, 1 de noviembre de 2020

Miguel D'Ors

El poeta gallego Miguel D'Ors rinde un hermoso homenaje a sus abuelos en nuestro poema de la semana. Las manos del abuelo, las zapatillas de la abuela trascienden su sencillez para expresar el amor del nieto a sus mayores. En este Día de Todos los Santos tan extraño queremos dedicar el poema a todos aquellos que han perdido a sus abuelos en esta terrible pandemia, que se ha cebado y lo sigue haciendo con la generación que ya sufrió una guerra y sus terribles secuelas. 

             LOS ABUELOS

 

El abuelo era blanco; conocía

dos cuevas y sabía seguir huellas de lobo.

La abuela era menuda y tibia como un nido:

jugábamos a pájaros con ella.

... Y, alrededor, los dos llevaban como

un contorno de campos y palomas:

cruzaban el umbral y parecía

que con ellos entraba el verano en la casa;

al contarnos los cuentos, en sus voces

oíamos molinos y cuervos alejándose

y hasta en las mismas ropas nos traían

un recuerdo fragante, un recuerdo lluvioso

del heno y la retama...

... Y el abuelo, qué manos de valiente,

qué venas, retorcidas como parras;

las ganas que me daban

de cumplir en un día sesenta y cuatro años

para tener dos manos como aquéllas...

 

Luego, la abuela, aquellas zapatillas

de nube que llevaba,

aquel ir y venir, como volando,

de la escoba al misal, de sus gallinas

a las sábanas frescas,

de la labor de lana a los geranios,

del pan a las mejillas de sus nietos...

que entonces, suavemente, quedábamos dormidos

creyendo que la abuela no se acostaba nunca.