William Wordsworth
Esta semana nos ha dejado un hombre, primero compañero y luego amigo, que disfrutaba con entusiasmo de todos los placeres del mundo de la cultura. Aunque su formación era científica, fue siempre un lector empedernido, un aficionado al cine, al teatro y a la ópera que sabía reconocer lo mejor de cada espectáculo y lo contaba con tanta emoción que revivía de nuevo el deleite que había experimentado. Curiosamente no era lector de poesía, pero estoy segura de que le habría emocionado este poema del poeta romántico William Wordsworth, que lee Natalie Wood en la película Esplendor en la hierba. Nuestro más sentido homenaje para Bernardo Rodríguez, in memoriam.
“What though the radiance which was once
so bright,
be now for ever taken from
my sight,
though nothing can bring
back the hour
of splendour in the grass,
of glory in the flower;
we will grieve not, rather
find
strength in what remains
behind;
in the primal sympathy
which having been must ever
be;
in the soothing thoughts
that spring
out of human suffering;
in the faith that looks
through death,
in years that bring the
philosophic mind.”
“Pues aunque
el resplandor que en otro tiempo fue tan brillante
hoy esté por siempre oculto
a mis miradas,
aunque nada pueda hacer
volver la hora
del esplendor en la hierba,
de la gloria en las flores,
no debemos afligirnos, pues
encontraremos
fuerza en el recuerdo,
en aquella primera simpatía
que habiendo sido una vez,
habrá de ser por siempre,
en los sosegados
pensamientos que brotaron
del humano sufrimiento
y en la fe que mira a
través de la muerte,
y en los años, que traen
consigo las ideas filosóficas.”